Todos los dirigentes de Podemos han puesto un sueldo público a sus parejas en el partido o las instituciones
M.A. RUIZ COLL 23/08/2020 06:50
Cuando Pablo Iglesias colocó a Irene
Montero, primero como número 2 del partido, y luego como ministra de
Igualdad, nadie levantó la voz en el seno del partido morado. En primer lugar,
por temor a las purgas con las que Iglesias ha lanzado al espacio exterior a
todos sus críticos: desde Íñigo Errejón a Ramón
Espinar.
Y
en segundo lugar, porque la práctica totalidad de los dirigentes de Podemos ha
enchufado a sus parejas con un sueldo público en el partido o en las
instituciones. Un nepotismo que también constituye una forma de
corrupción, pues sustituye el mérito por la proximidad al líder. Nada más
machista que una organización en la que la posición de las mujeres depende de
quién sea su pareja en cada momento.
La
limitación de cobrar como máximo tres veces el Salario Mínimo Interprofesional (SIM) al
mes, ya derogada en la última asamblea de Vistalegre, quedaba así en papel
mojado, pues las principales parejas del partido se llevan a casa un sueldo
público por duplicado.
Basta
un ejemplo: Pablo Iglesias cobra ahora 79.746 euros anuales como vicepresidente
del Gobierno y su pareja, Irene Montero, suma otros 74.858 euros al año. Juntos
se embolsan casi 13.000 euros al mes, para pagar la hipoteca de Galapagar.
Antes
de convertirse en la madre de los hijos de Pablo Iglesias, la ministra Irene
Montero había mantenido una relación con dos de los dirigentes de la máxima
confianza del líder de Podemos: Rafa Mayoral y Juanma del Olmo. Dos supervivientes de las
purgas que ahora se enfrentan a graves problemas judiciales.
El
titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid ha puesto en el punto de
mira al secretario de Movimientos Sociales de Podemos, Rafa Mayoral,
por el constante trasvase de dinero público desde el partido a la cooperativa
que fundó, Kinema. Ya en 2017, OKDIARIO informó de que la cooperativa de Mayoral había duplicado
sus ingresos en un solo año, pasando de los 700.000 euros hasta los 1,4
millones de euros, gracias a la llegada de Podemos a los ayuntamientos.
Además
de otorgarle subvenciones por importe de cerca de medio millón de euros desde
el Ayuntamiento de Madrid, Podemos contrató con dinero público a Kinema para
gestionar sus nóminas y otros trámites administrativos en toda España, y
también desde su grupo en el Parlamento europeo.
En
cuanto al secretario de Comunicación y coordinador de las campañas electorales
de Podemos, Juanma del Olmo, el juez le ha imputado por las
numerosas irregularidades contables denunciadas por el ex abogado del
partido José Manuel Calvente. Entre ellas, el contrato de 400.000
euros otorgado a la consultora Neurona Comunidad, que no tiene ni
un solo empleado en España, para diseñar su última campaña electoral. De esta
cantidad, 308.257 euros fueron transferidos inmediatamente a una cuenta en
México. La consultora Neurona utiliza la imagen del fundador de Podemos Juan
Carlos Monedero para conseguir contratos en toda América Latina.
La
actual pareja del imputado Juanma del Olmo es la portavoz de Podemos en la
Asamblea de Madrid, Isa Serra, que el pasado mes de abril
fue condenada a un año y siete meses de prisión, como autora de los
delitos de atentado a la autoridad, lesiones leves y daños a varios agentes de
Policía. El código ético de Podemos vuelve a ser papel mojado: pese a su
condena Isa Serra continúa en el cargo.
Íñigo
Errejón provocó un cisma familiar entre las hermanas Serra: mientras Isa se
convertía en candidata de Podemos a la presidencia de la Comunidad de Madrid,
su hermana Clara se incorporó a la candidatura autonómica de Más Madrid, aunque
finalmente abandonó su escaño en octubre de 2019. Ambas hermanas proceden de
una familia acomodada y defienden la escuela pública, aunque estudiaron
en un colegio privado bilingüe. Aficionada a la equitación, Clara Serra ha sido pareja de Dani
Iraberri, miembro del Consejo Ciudadano de Podemos y asesor de Pablo
Iglesias.
Lo
mismo ocurre en la estructura territorial de Podemos: antes de romper con Pablo
Iglesias, la líder del partido en Andalucía, Teresa Rodríguez, colocó a su pareja, José
Manuel González Kichi, como candidato a la Alcaldía de Cádiz.
La líder de Podemos en Navarra y actual secretaria de Estado para la Agenda
2030, Ione Belarra, enchufó a su pareja, Eduardo Ramos,
como asesor de Podemos en el Congreso de los Diputados.
El
entonces secretario general de Podemos en La Rioja, Kiko Garrido, colocó a su pareja, Nazaret
Martín, como contable del partido y luego intentó enchufarla como consejera
de Participación y Cooperación del Gobierno regional. Al final desistió, debido
al escándalo provocado en los medios.
Debido
al caso Dina-Iglesias y a la investigación judicial sobre la
financiación de Podemos, ahora se encuentra en la cuerda floja la
vicepresidenta tercera del Congreso de los Diputados, Gloria Elizo, cuya pareja, Pablo
Fernández, ha sido gerente del partido.
Ada Colau, Irene Montero
y Rafa Mayoral en el Congreso (Foto: Podemos).
La
web de Podemos dirigida por Dina Bousselham (a la que numerosos
medios señalaron en 2015 como la «nueva novia» de Pablo Iglesias, que acababa
de romper con Tania Sánchez) ya ha decretado la caída en desgracia
de Gloria Elizo por su estrecha amistad con José Manuel Calvente, el abogado
que ha destapado la corrupción del partido tras ser despedido con una
falsa acusación de acoso sexual.
Todo
esto es una broma comparado con lo ocurrido en la franquicia catalana de
Podemos. La alcaldesa Ada Colau creó para su actual
pareja, Adrià Alemany, el cargo de Responsable de Relaciones
Institucionales de Barcelona en Comú. Ambos proceden de la Plataforma de
Afectados por la Hipoteca (PAH), de la que Colau fue portavoz.
La
anterior pareja de Ada Colau fue Jaume Asens, al que colocó como tercer
teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, con un sueldo público de
98.192 euros. Antes de entrar en política, Asens fue el abogado del
asesino Rodrigo Lanza, de varios yihadistas y de tres miembros de la banda
terrorista ETA.
Jaume
Asens también fue quien aconsejó a Carles Puigdemont y a Toni
Comín que huyeran de España tras el golpe de Estado del 1-O y
contrataran como abogado a Gonzalo Boye, quien fue condenado a 14 años de
cárcel por colaborar con la banda terrorista ETA en el secuestro de
Emiliano Revilla. Como hombre de la máxima confianza de Pablo Iglesias, en
las últimas elecciones generales Jaume Asens ha sido el cabeza de lista de En
Comú Podem por Barcelona al Congreso de los Diputados. La actual pareja
de Asens es la actriz Leticia Dolera, referente del feminismo hasta que
despidió a una actriz por quedarse embarazada.
Por
abreviar. Durante su etapa como primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de
Barcelona, Gerardo Pisarello enchufó a su
pareja, Vanesa Valiño, como asesora de la Concejalía de Vivienda
con un sueldo público de 51.298 euros brutos anuales. Pablo Iglesias ha colocado
ahora al independentista Pisarello como secretario primero de la Mesa del
Congreso de los Diputados.
Otro
teniente de alcalde de Ada Colau, Eloi Badia, enchufó a su
pareja, Tatiana Guerrero, como asesora de la Alcaldía. Y la
concejal de Vivienda, Lucía Martín, enchufó a su novia, Alicia Ramos
Jordán, como asesora del área de Ecología del Área Metropolitana de
Barcelona.
Un
caso más cómico es el del diputado autonómico de En Comú Podem David
Cid Colomer, que siempre es pareja de la segunda teniente de alcalde del
Ayuntamiento de Barcelona: primero estuvo con Laia Ortiz y
ahora con Janet Sanz. El sueldo de ambas es de 98.192 euros
anuales.
También
se llevaban a casa un sueldo público por duplicado el ex líder de Podemos en
Cataluña Albano Dante Fachin y su pareja, Marta
Sibina, que fue la número 2 de En Comú Podem al Congreso de los Diputados por
Barcelona. Ahora ella se ha incorporado al Consell de la República creado
por Carles Puigdemont desde Bruselas para agitar el
independentismo.